Hoteles en Viena
Viena: descubra la capital austriaca en vacaciones
El H+ Hotel Wien está situado a dos kilómetros al noroeste del centro de la ciudad, con muy buenas conexiones de transporte. Le esperan 75 habitaciones modernamente amuebladas que ofrecen todo lo necesario para relajarse tras un largo paseo por la ciudad o una reunión de negocios. Tras un delicioso desayuno del bufé, empezará el día con las pilas puestas. Puede llegar a los famosos lugares de interés del centro de la ciudad a pie o en tranvía.
El H2 Hotel Wien Schönbrunn es ideal para visitar Viena: aquí encontrará económicas habitaciones dobles y con cuatro camas, podrá llegar a pie al Palacio de Schönbrunn y tendrá el metro junto a la entrada. Tampoco echará de menos ninguna comodidad: todas las habitaciones están climatizadas y tienen TV por satélite y cuarto de baño con ducha revigorizante. Otro aspecto muy práctico: en el H-Hub se pueden tomar comidas y bebidas.
Desde los magníficos palacios y jardines barrocos de la monarquía imperial y real hasta la arquitectura de la Ringstrasse, el modernismo o Hundertwasser, Viena tiene una gran variedad de arquitectura impresionante que ofrecer y es ideal para una escapada urbana en cualquier época del año.
El mejor lugar para experimentar el ambiente imperial de la gran ciudad es Palacio Imperial de Hofburg. El imponente conjunto de la antigua residencia imperial en torno a la Plaza de los Héroes (Heldenplatz) incluye edificios de diferentes épocas. El complejo principal con el palacio data del siglo XVI. Además de los Apartamentos Imperiales, también alberga varios museos, como el Museo Sisi, la Cámara del Tesoro Imperial (Kaiserliche Schatzkammer) o el Museo de Éfeso (Ephesos-Museum).
Puede pasar fácilmente un día entero o incluso varios días solo en los alrededores del Palacio Imperial de Hofburg durante su viaje a Viena, ya que aquí también se encuentran la Colección Gráfica del Museo Albertina, el Museo Austríaco del Cine, la Biblioteca Nacional y, por último, la mundialmente famosa Escuela Española de Equitación. El Palacio Imperial de Hofburg está rodeado por los jardines del palacio con la Casa de las Mariposas (Schmetterlingshaus), la Plaza de los Héroes y la Plaza María Teresa (Maria-Theresien-Platz), donde se enfrentan los magníficos edificios del Museo de Historia Natural y el Museo de Historia del Arte.
Viena muestra una cara completamente distinta en las bonitas calles, callejones y plazas del casco antiguo en torno a la Catedral de San Esteban. Aquí se refleja una perfecta combinación de hospitalidad austriaca y estilo de vida cosmopolita.
La cultura vienesa de los cafés, que incluso se ha nombrado Patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad por la Unesco, es casi un carácter simbólico de este encantador estilo: ¡merece la pena hacer una pausa! Vaya al Café Sperl, al Café Central, al Café Prückel, al Sacher, al Mozart, al Alt Wien, al Hawelka o como quiera que se llamen todos ellos: ¡hay casi mil cafés que siguen manteniendo las antiguas tradiciones en Viena hoy en día!
Las atracciones turísticas más populares de Viena
Una de las atracciones turísticas más populares del casco antiguo de Viena es sin duda la Catedral de San Esteban (Stephansdom). No debería faltar en ningún programa turístico de viaje a Viena. La Catedral de San Esteban está considerada uno de los edificios góticos más importantes de toda Austria e impresiona incluso desde el exterior: la torre tiene 136 metros de altura y el tejado, cubierto de tejas de colores, mide 110 metros enteros. También merece la pena ver el diseño interior, inicialmente medieval y posteriormente convertido en un magnífico estilo barroco. Pasee desde la plaza Stephansplatz y luego por la calle Kärntnerstraße (una de las calles comerciales más populares de Viena) hasta la Ópera Estatal en el Ring. Esta es en sí misma un edificio digno de ver y también un buen punto de partida para un paseo por el Ring: los magníficos edificios alineados aquí han pasado a los libros de texto de arquitectura como el «estilo vienés de la Ringstraße».
Otra atracción turística que no puede perderse en Viena es el Palacio de Schönbrunn (Schloss Schönbrunn). El complejo barroco es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco y, con su extenso palacio, el jardín barroco de 160 hectáreas y el zoo más antiguo del mundo, ofrece suficientes atracciones para un programa de todo un día.
Si le gustan los palacios y los jardines y además le gusta admirar el arte, no debe perderse el Palacio Belvedere. En la Galería austriaca Belvedere podrá admirar arte desde la Edad Media hasta el siglo XXI. Aquí destacan los pintores «fin de siècle» y del modernismo, incluyendo la mayor colección del mundo de Gustav Klimt y obras maestras de Egon Schiele y Oskar Kokoschka.
Los museos de arte de la ciudad de Viena se caracterizan por tener una gran diversidad. Uno de los museos más importantes del mundo es el Museo de Historia del Arte, que forma una unidad arquitectónica con el Museo de Historia Natural y alberga no solo la Pinacoteca, sino también la Colección Egipcio-Oriental, la Colección de Antigüedades y la Colección Numismática. El Museo Leopold, el Museo de Arte Moderno, el Edificio de la Secesión o el Albertina son otras direcciones de primera clase. La Casa Hundertwasser, uno de los edificios más fotografiados de la ciudad, también es colorida y rica en formas. ¡Tampoco debería faltar en su lista de recomendaciones de viaje para Viena!
Todavía estamos lejos de llegar al final de la lista de atracciones turísticas de Viena, pero, llegados a este punto, solo cabe mencionar una más: el parque Prater. La gran zona de excursiones y recreo es famosa sobre todo por su histórico parque de atracciones y, allí, por su noria de 65 metros de altura, que es uno de los emblemas de Viena.
Qué hacer en Viena y sus alrededores
Combine su estancia en Viena con excursiones a los alrededores de la capital. En Mödling, a unos 15 kilómetros al suroeste de Viena, hay varias atracciones: un paseo hasta el Templo de los Húsares o hasta las ruinas del Castillo de Mödling o una visita a las cuevas Seegrotte Hinterbrühl. Se trata de una antigua mina de yeso que, entre otras cosas, contiene el mayor lago subterráneo de Europa, que podrá descubrir en una excursión en barco.
Puede pasar un bonito día en la naturaleza, por ejemplo, en el monte Peilstein. Desde el Kalkberg, a 716 metros de altura, tendrá una hermosa vista de los Bosques de Viena. Póngase las botas y empiece a hacer senderismo desde el lago Schwarzensee o tome la ruta de senderismo de Peilstein desde Nöstach. Otros dos destinos turísticos populares son los jardines de flores de Hirschstetten o el Parque del Castillo de Laxenburg con su castillo, el Castillo de Franzensburg y varios estanques, pabellones y puentes.
Viena es una ciudad llena de belleza, diversidad y generosidad que siempre se merece una visita: ¡convénzase usted mismo/a!